El colectivo Gasteizkoak ha publicado traducido el Larrun de Argia dedicado a la propuesta de conversión transformadora que recoge el colectivo antimilitarista en su último libro (Convertir la industria militar de Euskal Herria. Para no fabricar más guerras). Pero si traemos a este blog la traducción de ese Larrun es principalmente por dos razones. Una, por ayudar a difundir una propuesta que en castellano está encontrando grandes resistencias para su publicación y, otra y principal, porque creemos que ese Larrun recoge una importante novedad: la mayoría sindical vasca alrededor de una mesa para valorar una propuesta de conversión de la industria para el desperdicio y la guerra, mediante una conversión a producción civil de utilidad social, que cuestione el sistema productivo.
Para colaborar en la difusión de un debate al que hay que seguir la pista, reproducimos también la valoración que hace Gasteizkoak sobre las repercusiones que están teniendo lugar:
Repercusiones de la publicación del libro y apuesta obscena del Gobierno Vasco por hacer negocio con las guerras
Desde que el pasado 14 de diciembre presentamos públicamente el libro “Conversión de la industria militar en Euskal Herria. Para no fabricar más guerras”, casualidad o no (y no somos de quienes creemos en las casualidades), ha habido no pocas novedades con respecto a la Producción de Euskal Herria para el Desperdicio y la Guerra (PEHDG, que es como proponemos llamar a lo que eufemísticamente denominan “industria de defensa”), algunas con mucha repercusión pública, y otras silenciadas. Conviene hablar de ellas y dejar constancia en esta web.
La presentación del libro tuvo un apreciable eco en algunos medios, aunque no todos supieron recoger la propuesta de fondo que conlleva: el planteamiento de una conversión de la PEHDG a producción civil, de utilidad social, y que cuestione el sistema productivo, como forma de intentar hacer frente a los grandes retos y crisis que hay planteados en la actualidad. Entre quienes sí lo entendieron citemos, por ejemplo, a Mar de fueguitos, y entre quienes no, a este reportaje en Gara.
“Casualmente” (o no), un mes después el Foro Zedarriak presentaba públicamente un informe, en cuyo marco aprovechaba por abogar por abrir el debate sobre la conveniencia de impulsar en Euskal Herria la producción militar (entre otras cosas, porque también proponía debatir sobre la producción de energía nuclear).
Lo que no sabía Zedarriak es que 11 días después, el medio que con más interés y profundidad ha abordado la propuesta que encierra nuestro libro, Argia, iba a dedicar a la cuestión todo un Larrun de 20 páginas, en el que, además, se incluía una primicia: la mayoría sindical vasca hablando en público de forma conjunta por primera vez sobre la PEHDG, donde, principalmente, comentan sus puntos de vista sobre nuestra propuesta. Ese Larrun, y en concreto ese coloquio sindical, nos parece que puede ser una herramienta muy válida en muchas zonas del Estado español, por lo que hemos decidido (con permiso de Argia, claro) traducirlo al castellano y ofrecéroslo aquí (lo tenéis, en castellano, y su versión original en euskera, en la cabecea de esta entrada)
Tras las declaraciones explosivas de Zedarriak, quisimos desvelar las razones de su propuesta, dejando claro que, en realidad, no hacían sino desarrollar la tarea de lobby vasco de la industria militar. Para ello elaboramos un texto que inicialmente solo fue sido recogido por dos medios euskaldunes, de nuevo Argia, y también Berria. En un principio no fue publicado en ninguno de los medios a los que se lo remitimos en castellano, a pesar de ser muy variados ideológicamente (El Salto, Gara/Naiz, Diario Socialista, Público o elDiario.es). Por todo ello, tuvimos que optar por colgarlo en esta web y pediros a todas y todos colaboración en su difusión. Se trata del texto Zedarriak y sus intereses e implicaciones como lobby de la armagintza (PEHDG). Finalmente, gracias a vuestra colaboración, Gara/Naiz se animó a publicarlo, y no solo eso, sino que con vuestro apoyo, el artículo colgado en la web llegó a las 2.000 visitas en solo una semana. Un millón de gracias.
Pero la cuestión no quedó ahí. Once días después de la publicación del Larrun sobre la armagintza, el vicelehendakari y consejero de Economía, Mikel Torres, aprovechaba otro foro público para animar a invertir en la industria para la guerra, porque va a llenar los bolsillos de los fabricantes de armamentos que, reconoce, “forma parte y muy importante de la economía vasca”[1]. ¿Y los principios? Para Torres lo importante es apoyar a la PEHDG “por supuesto que el Gobierno Vasco, en todo aquello que pueda apoyar, para poder de alguna forma desarrollar y abrir a esas empresas nuevos mercados y productos” (solo le ha faltado decir, apoyar con nuevas ocasiones de negocio, esto es, nuevas guerras), los principios quedan al margen: “otra cosa diferente es las posturas ideológicas que podamos tener cada uno de nosotros en este ámbito”, que es como decir, “la ética ya lo utilizaremos luego para acoger a algunas pocas personas refugiadas de las cientos de miles que huyan de esas guerras que cofabricamos”. Debe ser la forma extraña de poner en práctica esos lemas que el Gobierno Vasco utiliza en sus membretes: “Euskadi, bien común. Euskadi, auzolana”.
Bueno, está claro que el desarrollo de la industria armamentística y de la industria militar va a tener un desarrollo muy potente en los próximos años, no solamente porque es evidente, no solamente a través de los planes que pueda tener la Unión Europea, y sobre todo por las noticias que estamos conociendo, tenemos la suerte en Euskadi de poseer unas industrias tanto en ingeniería como en fabricación, que trabajan mucho para ese tipo de ámbito, creo que es una oportunidad para nuevos productos que de alguna forma puedan abrir nuevos mercados porque eso finalmente va a beneficiar no solamente a esas empresas líderes sino también a toda la subcontratación que hay en Euskadi. Creo que es un teme en el que estamos y formar parte y muy importante de la economía vasca, que no tenemos que tener miedo, todo lo contrario, gran parte de la industria tecnológica que esté en Euskadi se ha dirigido en muchos sectores estratégicos al ámbito militar, y otra cosa diferentes es las posturas ideológicas que podamos tener cada uno de nosotros en este ámbito, pero yo creo que es una oportunidad importante, la industria armamentística es una industria potente en Euskadi, que no podemos mirar hacia otro lado, y que va a tener un desarrollo en un futuro importante, y en ese sentido por supuesto que el Gobierno Vasco, en todo aquello que pueda apoyar, para poder de alguna forma desarrollar y abrir a esas empresas nuevos mercados y productos, pues va estar, por supuesto, en beneficio de todo el país. En ese sentido yo creo que no tenemos que tener miedo a hablar de esas cosas.
Pero cabría preguntarse ¿qué ha pasado para que en poco más de 5 años hayamos pasado de las declaraciones de Urkullu[2] en las que decía que la industria armamentística vasca se reducía a unas pocas fábricas de armas de caza, a estas en las que el consejero de Economía y Trabajo afirma que “la industria armamentística es una industria potente en Euskadi”? La respuesta no es muy distinta a la que planteamos en nuestro libro sobre lo que ha sucedido en la política de la Unión Europea con respecto a la producción del desperdicio y la guerra: que el lobby de la industria militar ha sabido infiltrarse en ámbitos de decisión política hasta condicionar sus políticas al respecto.
En el libro detallamos documentalmente lo sucedido en Europa, pero en Euskal Herria esa misma dinámica también se va pudiendo documentar poco a poco. Porque al dato de que el lobby vasco de la PEHDG, Zedarriak, consiga arrastrar a las autoridades vascas a la presentación del informe en el que aboga por impulsar la PEDHG, y al hecho de que poco después miembros del propio Gobierno Vasco defiendan con contundencia los intereses de la PEHDG, hay que añadir ahora que el propio lobby va a tener mano directa en la elaboración del Plan de Desarrollo Industrial 2025-2028 del Gobierno Vasco, pues la empresa a la que se le ha adjudicado su elaboración es Zabala Innovation, quien forma parte de la PEHDG, y cuyo Management Board Advisor no es otro que Gabriel Dorronsoro, portavoz y coordinador habitual de Zedarriak. A Torres, desde luego, no le habrá costado aprender cómo hacer de vocero de los mercaderes de la muerte vascos, teniendo en cuenta que en la Comisión Ejecutiva del PSE-EE comparte mesa con José Ignacio Asensio, quien durante un periodo (2013-2015) fue el Responsable de Desarrollo de Negocio de Sapa, una de las principales empresas de la PEHDG ¿Tiene o no tiene habilidad el lobby armamentista vasco para influenciar las políticas?
La cuestión se agrava mucho más cuando esas declaraciones de Mikel Torres, no desmentidas por el Gobierno Vasco, suponen ciscarse sin ningún pudor en la Ley 3/2024 de Cooperación y Solidaridad del Parlamento Vasco[3] que en su artículo 10, punto 4, afirma que “no colaborará con aquellas personas físicas o jurídicas dedicadas a la producción, comercialización y financiación de armamento o tecnología de uso militar.”
Igualmente, también vamos encontrando cada vez más repercusiones interesantes entre las trabajadoras y trabajadores con conciencia. Desde que publicamos el libro se han puesto en contacto con los grupos antimilitaristas dos casos (uno de un trabajador, a nivel individual, y otro de toda la plantilla, uno en Araba y otro en Bizkaia) en los que se han negado en la actualidad a fabricar determinados productos porque sabían que iban a destinarse a la PEHDG. No sólo eso, sino que a raíz de los debates que se están generando, por ejemplo este de Radio Euskadi, hemos conocido un caso de una empresas vasca que, a pesar de su delicada situación económica, cuando recibió un pedido millonario para fabricar productos que acabarían en una guerra, el propio responsable de la empresa, por conciencia y coherencia, rechazó el pedido. En ese mismo programa, un oyente comenta que él también se negó (en una empresa de Gasteiz) a embalar misiles europeos. Tenemos el convencimiento de que el rechazo de la sociedad vasca al militarismo habrá propiciado bastantes más casos de los que se conocen. (Por cierto, si conocéis algún caso, podéis poneros en contacto a través de este correo electrónico: gasteizkoak@gmail.com). Añadamos también como repercusión del libro que nos han llegado informaciones (que hemos podido verificar) que añaden 12 nuevas empresas a la lista de las que toman parte en la PEHDG.
Ante todo ello, para hacer frente a la propuesta belicista del Gobierno Vasco y el lobby armamentista, desde el antimilitarismo proponemos al conjunto de personas y fuerzas que aspiran a transformar la realidad actual, un verdadero auzolan, que tenga como objetivo un proceso de conversión que posibilite una Euskal Herria libre de fabricación para el desperdicio y la guerra. Pero esa conversión, para ser realmente transformadora y no meramente economicista, tiene que ir ligada a una nueva producción de utilidad social que cuestione el actual sistema productivo y que, además, se ponga como objetivo que las alternativas a la producción se centren en buscar soluciones a las crisis medioambientales y energéticas, al abandono a su suerte de las tareas de cuidados, pasando por las carencias sanitarias y llegando a algunas de las cuestiones que siguen abriendo brechas entre países y personas enriquecidas y empobrecidas (las clases sociales). Esto es, los verdaderos retos y necesidades del planeta y las personas, y una apuesta por hacer posible que las próximas generaciones tengan el futuro que la apuesta militarista por las guerras y su industria les niega. Para ello se necesitan la implicación directa de movimientos populares y sindicales, no para apoyar, sino para entre todas y todos organizar los contenidos y formas de ese gran auzolan para acabar con la PEHDG y que Euskal Herria deje de fabricar guerras. En ello seguiremos trabajando.
———————
[1]https://www.irekia.euskadi.eus/es/web_tv/22636-vicelehendakari-mikel-torres-muestra-confianza-economia-vasca-contexto-incertidumbre-internacional?criterio_id=810542
[2] Radio Euskadi, 04-09-2017. https://www.irekia.euskadi.eus/en/news/40563-lehendakari-octubre-puede-ser-una-estacion-inicio-para-reflexionar-sobre-modelo-estado
[3]https://www.euskadi.eus/web01-bopv/es/p43aBOPVWebWar/VerParalelo.do?cd2024001067
No hay comentarios:
Publicar un comentario