martes, 21 de enero de 2025

Mensajes de los Encuentros de Resistencia y Rebeldía

 


Como ya comentamos en su día, los pasados 28, 29 y 30 de diciembre tuvo lugar en San Cristóbal de las Casas la primera parte de los Encuentros de Resistencia y Rebeldía convocados por el Zapatismo, que contaron con la presencia de 1.079 firmantes de la Declaración por la Vida; 245 grupos, movimientos u organizaciones, 35 medios libres, y más de 900 zapatistas. El lugar de procedencia de las personas asistentes era de prácticamente todos los Estados de la República Mexicana, y de 46 países o geografías del mundo. Los videos y audios están disponibles en esta página de enlace zapatista.

 Para quienes no hemos tenido oportunidad de oír a las gentes de las comunidades zapatistas explicando sus análisis y actual proceso, es todo un descubrimiento oír a decenas de ellas, ellos, elloas, contarnos los detalles de todo ello. Mucho más si tenemos en cuenta que “el Castilla” que utilizan para ello es en muchos casos su tercer, cuarto o quinto idioma. Así que el esfuerzo es muy notable y de agradecer. Y consiguen hacerse entender, que es de lo que se trata. Ya quisiéramos conseguirlo algunas con un tercer idioma, al que habitualmente ni llegamos.

 No obstante, el captar en toda su profundidad el mensaje de las y los compas, no depende sólo del conocimiento de idiomas. Así, a quienes no conocemos bien la cultura de las comunidades indígenas, ni su cosmovisión, ni sus referencias vitales… nos viene de perlas la labor de traducción/explicación que habitualmente realiza el capitán Marcos, quien ha dejado claro en sus intervenciones en este encuentro que sigue en plena forma en su “labor traductora”, tanto en lo pedagógico, como en los humorístico y, sobre todo, en la claridad sin concesiones, que es la que practican las comunidades zapatistas. Ello lo lleva a cabo a través de sus intervenciones denominadas “La Cofa del Vigía”, especialmente de la denominada “Señales al mañana”, de la que ahora, para animar a que la escuchéis entera, vamos a resumir algunos de los principales pasajes.

 

El capitán, como ya sugirieron hace tiempo, nos pone mirando a 2144, es decir, dentro de 120 años:

 Vamos a suponer lo siguiente, se imaginen. Imaginen que un compañero o compañera ciudadano, (ustedes no tienen que sentirse ofendidos porque digamos ciudadanos, nos estamos refiriendo a su lugar de lucha de resistencia, así como los de Europa les decimos del charco -no podíamos decirlo antes porque no habíamos brincado el charco, pero ahora ya lo brincamos). Entonces hagan de cuenta que se acerca un ciudadano o una ciudadana, alguno de ustedes y me dice, capitán, quiero hablar contigo. Yo lo primero que pienso es que no me puse el pantalón y que ese compañero y compañera con mucha discreción me va a decir, estás en pelotas, capitán (tampoco hay mucho que ver, eh) Pero bueno, yo pienso bien de ese compañero o compañera y digo, sí, di, mi compañera. La compañera o compañero trae cara de ¡patria o muerte! ¡Venceremos! ¡No nos moverán! O sea, está firme, ¿no? Entonces me dice, Oye, capitán, ustedes están chingue y jode con lo del día después y están con eso de que dentro de 120 años, ¿no? ¿cómo es eso? Entonces yo le digo, ahí lo vamos a ver, compañero o compañera. Y entonces le pido a los compañeros y compañeras tercios: compa comuníqueme como el año 2144, dentro de 120 años.

 

Consiguen ponerle en comunicación con ese año, y en la transmisión aparece una niña de 7 años. Y sigue su relato el capitán:

 pero usted lo que quiere saber es cómo es el futuro; es lo que le quiere preguntar y entonces pregunta, ¿cómo están allá? La niña parece entender ahora porque hace gestos, se acciona y le responde: depende. Usted maldice que está hablando con una niña y no con un especialista, un gobernante o una historiadora. Así que, desesperado o desesperada, usted responde, ¿depende de qué? Y la niña le vuelve a responder: depende de qué estás haciendo allá en tu calendario. Se corta la comunicación. Usted maldice al equipo de apoyo, a los tercios compas, a los medios libres, a los Gales, a los Acegazes, a los Acegazes, al Comité Clandestino Revolucionario Indígena, comandancia general, etcétera, a los zapatistas en general y en especial al capitán, por ponerle a usted, una persona seria y respetada y respetable, en esa situación absurda. El capitán solo sonríe, como diciendo, odio decir que te lo dije, pero te lo dije. Mientras, usted cae en la cuenta de que lo que importa no es esa comunicación, sino poder responder a la pregunta de qué estás haciendo ahorita, para que yo te pueda contestar, qué está pasando dentro de 120 años.

 

El capitán nos sitúa también tanto en el momento actual del zapatismo, como en el marco que le quieren dar a estos Encuentros por la Resistencia y la Rebeldía:

martes, 7 de enero de 2025

Conversión transformadora de la armagintza (a pesar de la manipulación del GARA)

 

Iraultzak Lagunduz no está pensado para abordar los temas relacionados con las militancias de quien lo impulsa, pero en este caso vamos a hacer una excepción, porque creemos que la cuestión que vamos a analizar sirve también para entender algunos de los procesos políticos que se están dando en Euskal Herria, y que muchas veces escapan a la mirada general de quien no conoce los pormenores. Nos referimos a la manipulación interesada de mensajes en algunos medios “progresistas”, que en ocasiones distorsionan o tergiversan los contenidos de los movimientos populares, para adaptarlos a parámetros asumibles por sus propios planteamientos políticos. El hecho que vamos a narrar en esta ocasión tiene que ver con el antimilitarismo, pero puede que suceda en otras temáticas que no conocemos en profundidad. Vayamos al grano con esta entrada breve.

 

El pasado 30 de diciembre GARA dedicaba el primer titular de su cabecera, el editorial y las dos primeras páginas de la edición a recoger algunos pormenores del libro recientemente publicado por el colectivo antimilitarista Gasteizkoak, “Conversión de la industria militar en Euskal Herria. Para no fabricar más guerras”. A primera vista, cualquiera podría sacar la impresión de que GARA hace todo un despliegue de medios para apoyar el trabajo de un movimiento popular, en este caso el antimilitarismo. En esa línea, fueron bastantes las felicitaciones que recibió Gasteizkoak por el eco en GARA de su trabajo.

 

Pero, si nos fijamos con atención, la realidad es muy otra. Porque la propuesta principal que pone sobre la mesa el mencionado libro es la de trabajar en auzolan para desarrollar un proceso de conversión transformadora a producción civil de utilidad social que cuestione el sistema productivo, y en el que entre las plantillas y los movimientos populares se plantee la cuestión de qué fabricar, para qué fabricarlo, y cómo fabricarlo. Y sobre esta propuesta de conversión transformadora y cuestionadora del capitalismo no hay ninguna referencia, ni en las dos páginas del reportaje, ni en el editorial. Es más, tanto en un lugar como en el otro (el editorial y el reportaje), la referencia que se hace a la conversión es que, según GARA , para Gasteizkoak la reconversión sería (y lo ponen entrecomillado, como si fueran palabras del colectivo antimilitarista) “algo que ya se ha realizado en diferentes momentos históricos sin que se socavasen los cimientos del sistema capitalista”. Es decir, una conversión ni transformadora ni cuestionadora, que es la que parece apoyar GARA , pues en la editorial, precediendo al entrecomillado comentado se dice que “conviene escuchar a Gasteizkoak”.

 

¿Cómo consigue GARA (o quien elabora el reportaje y la editorial que, si es la misma persona, es un periodista con larga trayectoria en el medio) ese aparente milagro de convertir la propuesta de Gasteizkoak en algo completamente distinto y descafeinado? Para empezar, poniendo en la boca de Gasteizkoak lo que no dice, pues ese párrafo que se le atribuye, tanto en la editorial como en el reportaje, no es de Gasteizkoak, sino que pertenece al texto del prólogo redactado por Corsino Vela (página 13 del libro). Pero, por otro lado, y siendo más grave, sacando completamente de contexto las palabras de Corsino, pues el prologuista hace esa referencia a anteriores experiencias de conversión que no socavaban el capitalismo para poder llegar a la conclusión de que la propuesta de Gasteizkoak es muy otra pues “La conversión aquí propuesta adquiere una tendencia transformadora que apunta más allá de un cambio formal, administrativo, de la producción militar hacia la producción civil como recurso táctico para mantener el mismo modo de hacer y de concebir la producción y la tecnología que la soporta. En eso consistieron las reconversiones de la industria militar a lo largo del siglo xx. Sin embargo, el concepto de conversión que propone Gasteizkoak abre la espita a otros cuestionamientos inmediatos que tienen que ver directamente con la reproducción social o modo de vida en la sociedad militarizada (…) A fin de cuentas, lo que confiere carácter realmente revolucionario o transformador a una acción determinada no es el discurso que la acompaña, sino en qué medida destapa las contradicciones sociales y en su propia manifestación práctica pone en tela de juicio el orden hasta entonces dominante. Y la conversión de la industria militar que propone este libro plantea, al menos, esa posibilidad.

 

La contundencia de las palabras de Corsino, más los argumentos que se exponen a lo largo de la parte del libro dedicada a la propuesta de conversión transformadora, no dejan lugar a dudas sobre las características y contenidos de la propuesta, como así lo han entendido los otros medios que la han recogido (véase, por ejemplo, este de Argia), por lo que la “maniobra” de GARA no se puede achacar a una pésima interpretación de la propuesta de Gasteizkoak, y solo queda deducir un interés político en descafeinarla, despojándola de sus contenidos cuestionadores del capitalismo, y de sus planteamientos transformadores. Pero a eso se le llama, entre otras cosas, manipulación, y lo que se puede interpretar a primera vista como un apoyo a los movimientos populares, se convierte así en todo lo contrario: no difunde sus propuestas, sino que las tergiversa. Habrá que tenerlo muy en cuenta.